Nacional
El Congreso de la oposición democrática
Por José Arlex Arias
El 27 y 28 de octubre pasado los colombianos asistimos a una especie de espectáculo, cuya calificación es subjetiva dependiendo del lado del prisma con el que se analice, pero que en mi concepto, como mínimo contenía un alto grado de manipulación por parte de los grandes medios
Por José Arlex Arias
El 27 y 28 de octubre pasado los colombianos asistimos a una especie de espectáculo, cuya calificación es subjetiva dependiendo del lado del prisma con el que se analice, pero que en mi concepto, como mínimo contenía un alto grado de manipulación por parte de los grandes medios
de comunicación que obedecen a un orden social establecido con el cual a los detentadores del poder les va supremamente bien. Se trató de la convención, o congreso, del partido de la Unidad Nacional o simplemente U -de Uribe-, pero que muy bien podría ser S -de Santos- y en el futuro cualquier letra del abecedario.
En el partido de la U están concentradas las principales decisiones que afectan el diario trasegar de los colombianos. La ideología, los pronunciamientos y decisiones son tan fundamentales para el pueblo, que si la inmensa mayoría de la población tuviera en cuenta los principios filosóficos y normas que aglutinan a los partidos, seguro fuera más cuidadosa al momento de emitir su voto electoral. El partido de la U ha logrado nuclear el Poder en Colombia alrededor de dos dirigentes como son Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos. Lo más increíble es pretender convencer a los colombianos de que el primero es el opositor del segundo. Menos mal que existen sectores que le clarifican al país que “Santos es igual a Uribe III”. Es ahí precisamente el punto de partida y llegada para la más grande manipulación de la política en el país.
Santos como Uribe están entre los que han dirigido este país desde el año 1989, cuando se comienza a implementar el Consenso de Washington, con toda la política de Globalización, Modelo Neoliberal y Apertura Económica que le viene arrebatando los patrimonios a las Naciones en beneficio de las transnacionales -especialmente gringas-. Ellos ayudaron a implementar medidas como: Tratados de Libre Comercio, la toma del mercado interno, la rebaja de impuestos a esas multinacionales, las privatizaciones, la flexibilización o pauperización laboral, la seguridad jurídica, límites a las libertades democráticas, las reformas a la superestructura del Estado y la libertad de tarifas o precios, entre otras, con las cuales les garantizan la recomposición de su tasa interna de retorno. No existe ni una sola de estas medidas en la cual Santos y Uribe hayan tenido, en el pasado y ahora, ningún tipo de diferencias.
Es decir, Santos y Uribe pertenecen a la manada neoliberal que desde los “sanedrines” de Barco, los “yupies” de Uribe, “la Panda de los Andes”, entre otros, al estilo de los “Chicago Boys” gringos, se han perfilado dizque como la nueva generación de “revolucionarios” políticos. El “Revolcón” de Gaviria fue precisamente acompañado por Santos y Uribe, cómplices de todas las medidas neoliberales vaciadas en nuestra Constitución Política Nacional y posteriormente regladas mediante Reformas de Primera, Segunda, Tercera y ahora de Cuarta generación en la superestructura del Estado. Todo para privatizar a favor de algunos pocos la gran riqueza del país y socializar la miseria y pobreza de la población, de donde sale la famosa política “focalista” –ayudar al más pobre entre los pobres–, asistencialista y cautivadora de clientela. Con estos expedientes se tendrán que esforzar demasiado para hacernos creer que Uribe es opositor de Santos. En la lógica del mercado, el congreso de la U tuvo todo tipo de cobertura mediática.
Pues bien, entre el próximo 9 y 10 de noviembre se realizará el III Congreso Nacional del Polo Democrático Alternativo -PDA-, que reunirá a 750 delegados elegidos democráticamente por quienes consideran que este país necesita y merece un paradigma diferente al modelo neoliberal; por ello es el único partido de oposición en Colombia. Los grandes medios de comunicación sólo miran al PDA cuando se trata de maximizar lo que ellos catalogan como sus errores; lógico, los medios nunca han sido objetivos -todos tienen su ideologización-, por lo que lo único que buscan es aplastarlo, como ha sucedido con casi todas las expresiones antagónicas al status quo del país. El PDA sigue siendo el único partido que tiene la filosofía y la estructura para avanzar en esa dirección; se le presentarán miles de obstáculos pero también es cierto que cuenta con dirigentes capaces para salir adelante. Ese es el reto de su Tercer Congreso Nacional y no les quedará pequeño.
¡Los colombianos debemos propender por un cambio de Modelo Económico; en el fortalecimiento del PDA hay una gran oportunidad!
arlexariasarias@hotmail.com
6 de noviembre de 2012.