Crónica de una muerte anunciada

– Colombia podría estar en la mira de organismos internacionales por la violación a los derechos laborales colectivos que reina en la capital del país.

• Colombia podría estar en la mira de organismos internacionales por la violación a los derechos laborales colectivos que reina en la capital del país.

Pareciera que lo sucedido con la empresa Aguas de Bogotá y sus 3.700 trabajadores, excluidos de la prestación del servicio de recolección de basuras, fue una acción premeditada para debilitarla a tal punto que ésta no participó en la licitación de aseo.

Eso es lo que se puede concluir al revisar hoy los hechos que antecedieron la no participación de la empresa Aguas de Bogotá en la licitación ya hoy adjudicada; meses atrás hubo el despido de algunos supervisores y trabajadores, cargos que nunca fueron remplazados por otros funcionarios.

Adicionalmente, se congeló el mantenimiento de los vehículos recolectores de basura, pese a que el gerente tenía conocimiento del mal estado de varios de los vehículos.

La falta de trabajadores y los vehículos en mal estado causaron un rezago en la prestación del servicio. ¿Será que la crisis actual de basuras tiene que ver con dicho rezago?

Algunos de los ex trabajadores de Aguas de Bogotá tenían estabilidad laboral reforzada por su condición de vulnerabilidad, ya sea por ser madres cabezas de hogar, desplazados, algunos con enfermedades crónicas, y difícilmente serán contratados en otra entidad; otros, son sindicalistas que hoy están siendo foco de la más evidente persecución a las organizaciones sindicales.

No solo no se les ha resuelto el tema laboral, sino que hoy están siendo denunciados y demandados y así poder tener razones para despedir a los que están en estabilidad laboral reforzada.

Este hecho contrasta con los esfuerzos reiterativos que ha venido haciendo Colombia desde el año 2008 por ingresar a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) y que ha intensificado el presidente Juan Manuel Santos en los últimos años.

Esta aspiración de Colombia por hacer parte de la Ocde se ha visto obstaculizada precisamente porque hacer parte de este grupo en el que sólo están 35 países, entre ellos solo dos latinoamericanos, México y Chie, obliga a mantener estándares de calidad en la política pública, promover el empleo y la calidad de vida de los ciudadanos.

Para que Colombia ingrese a la Ocde hace falta la aprobación del Comité Laboral, que contempla dentro de los requisitos la promoción de la organización sindical, opuesto a lo que en Bogotá estamos evidenciando, la persecución a la organización sindical. ¿Cómo verá la comunidad internacional que en Bogotá estén demandadas las 18 organizaciones sindicales que existían en Aguas de Bogotá?

Vamos a poner en conocimiento de las instancias internaciones la persecución laboral individual y sindical ante todas las instancias internacionales competentes. La OIT sabrá que en la capital del país se viola el Convenio 087 que dice que el estado colombiano debe garantizar el ejercicio de asociación sindical y no generar acciones atentatorias contra este derecho, así como también se violan los acuerdos laborales establecidos en el TLC y en Acuerdo de Cooperación laboral firmado con Canadá.

Xinia Navarro, concejala Polo Democrático Alternativo

Bogotá, marzo 1 de 2018