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¿Fiscal o politiquero?

El Estado colombiano ha sido secuestrado por la corrupción, la politiquería y las mafias. La mayoría de los Fiscales Generales colombianos han sido señalados por corrupción, algunos de ellos por tener vínculos con el narcoparamilitarismo.

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El Estado colombiano ha sido secuestrado por la corrupción, la politiquería y las mafias. La mayoría de los Fiscales Generales colombianos han sido señalados por corrupción, algunos de ellos por tener vínculos con el narcoparamilitarismo.

El actual fiscal Néstor Humberto Martínez es cercano al uribismo y cuota política de Germán Vargas Lleras, fue asesor de Luis Carlos Sarmiento Angulo y Odebrecht, hace parte de la clase politiquera corrupta que ha gobernando a nuestro país durante un poco más de 200 años.

Néstor Humberto aparece en los llamados “Papeles de Panamá” o sociedades offshore en paraísos fiscales, al igual que su excliente Luis Carlos Sarmiento, socio de Odebrecht a través de una de las compañías del grupo Aval, Estudios y Proyectos del Sol (Episol); que su jefe político Germán Vargas Lleras; que el patrocinador de las campañas políticas de Cambio Radical, Alberto Ríos, también accionista de Recaudo Bogotá y varias empresas en el país y en el exterior; y como varios de sus aliados políticos y exclientes, entre ellos, los hijos del expresidente Álvaro Uribe, Tomás y Jerónimo Uribe Moreno; los exministros de Hacienda Alberto Carrasquilla y Juan Carlos Echeverry, implicados en el desfalco de Reficar; el zar de las basuras William Vélez, con varios contratos en el país; el expresidente de Conalvías, Andrés Jaramillo, capturado por el carrusel de contratos de Bogotá; los actuales secretarios de Planeación y de Movilidad del alcalde de Bogotá Enrique Peñalosa, Andrés Ortiz y Pablo Emilio Bocarejo, con intereses en varios contratos a través de sus empresas Conconcreto e Ingenieros Consultores y Cia S En C.S. (Ver video)

Antes de ser fiscal, Néstor Humberto aseguró no tener impedimentos para ejercer el cargo, pero cuando se demostró que había firmado documentos como asesor de Odebrecht en el otrosí de la adición de la vía Ocaña-Gamarra al contrato de concesión de la Ruta del Sol II, se declaró impedido.

Siendo Ministro de la Presidencia, Néstor Humberto en compañía del exvicepresidente Germán Vargas firmó el documento Conpes No.3817 autorizando la adición de la vía antes mencionada, lo cual conduce a la siguiente pregunta: ¿Néstor Humberto Martínez autorizó un prevaricato e indujo al Consejo de Ministros a que esto se diera para favorecer a su jefe político Germán Vargas Lleras, quien era el más interesado en obtener recursos para el programa de las llamadas “carreteras 4G”, dineros estos que serían utilizados para hacer campaña política hacia la Presidencia en 2018?. (Ver video)

El fiscal, quien fue asesor de Luis Carlos Sarmiento -Corficolombiana del grupo Aval- socia de Odebrecht en el contrato de la Ruta del Sol, se apresuró a decir que en el caso de la adjudicación del contrato de navegabilidad del río Magdalena a la concesionaria Navelena, de la cual hace parte Odebrecht en un 86%, no había ninguna irregularidad, pero tres semanas después tuvo que reconsiderar su afirmación y reconocer que hay evidencias de posibles violaciones a las normas de contratación pública en esta adjudicación. (Ver video)

Firma de Néstor Humberto Martínez asesoró a Banco Agrario en contrato de Navelena.

Hasta el momento, la mayoría de las actuaciones del Fiscal han sido muy dudosas, como el archivo de la investigación a Óscar Iván Zuluaga por el caso del hacker Andrés Sepúlveda, condenado a 10 años de prisión, pese a la prueba reina del video.

Néstor Humberto Martínez se ha dedicado a lanzar cortinas de humo, al parecer buscando encubrir a sus exclientes y tratando de lanzarle un salvavidas a sus amigos, quienes podrían ser investigados por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) frente a la cual parece más interesado en atravesarse, que en brindar cooperación institucional para sacarla adelante. Busca cualquier pretexto para obstaculizar la implementación de los acuerdos de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC-EP.

Las cortinas de humo del fiscal:

Los amigos de Germán Vargas Lleras en la Corte Suprema de Justicia fueron quienes archivaron la investigación que lo acusaba de vínculos con el paramilitarismo. Ellos nombraron al Fiscal General Néstor Humberto Martínez y, este a su vez, nombró al corrupto exfiscal Anticorrupción Luis Gustavo Moreno a petición de Vargas Lleras. Gustavo Moreno, era el intermediario para pagar sobornos al expresidente de la Corte Suprema, Leonidas Bustos, con el objetivo de impedir la acusación judicial de los congresistas comprometidos con la parapolítica.  

El expresidente de la Corte Suprema de Justicia, Leonidas Bustos, acusado de recibir sobornos y cuya exesposa, Ana Josefa Velasco, fue reenganchada en un cargo más alto en la Procuraduría de su amigo Alejandro Ordóñez, fue sostenido y defendido por el fiscal Martínez, como quedó evidenciado en el debate de equilibrio de poderes.

Luis Gustavo Moreno y Majer Abushihab, asesor del Fiscal Néstor Humberto, trabajaban de la mano de una oficina privada de para-investigadores criminales al servicio de los abogados defensores de grandes casos de corrupción, mafiosos y parapolíticos, entre ellos: “la Gata”, “los Mellizos”, los Nule, la DNE, Odebrecht, Tomás y Jerónimo Uribe, Luis Alfredo Ramos, Nancy Patricia Gutiérrez, Hernán Andrade, Musa Besaile, el general Mario Montoya. Gustavo Moreno experto en ensuciar procesos judiciales con testigos falsos, montó un concierto para delinquir desde la Fiscalía General de la Nación. (Ver video)

Aunque el fiscal Martínez diga lo contrario, el exfiscal extraditable, Gustavo Moreno, sí tuvo que ver en el caso Odebrecht. (Ver video)

En el momento en que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos pedía la captura de Gustavo Moreno, “coincidencialmente”, ocurrió el miserable y criminal atentado terrorista en el Centro Comercial Andino y precisamente cuando el corrupto fiscal Anticorrupción Moreno es detenido con participación de la DEA en cumplimiento de la orden de captura emitida por Interpol en Lyon, Francia, con fines de extradición, ya la Fiscalía General había lanzado una cacería de brujas inculpando y capturando a personas que parecen inocentes, con pruebas poco creíbles para expertos, abogados y opinión pública en general.

Adicionalmente, cuando capturan al corrupto exfiscal extraditable, Néstor Humberto Martínez, también “coincidencialmente”, se enferma y es hospitalizado en la Clínica del Country de Bogotá, la cual a través de un comunicado informó que el Fiscal se encontraba hospitalizado después de haber ingresado a este centro con un dolor de espalda.

Mientras, el fiscal Néstor Humberto Martínez negaba sistematicidad en el homicidio de líderes sociales y no mostraba resultados en la lucha contra la corrupción, las mafias y el paramilitarismo, se trasladaba al aeropuerto El Dorado para reunirse con la exfiscal venezolana, Luisa Ortega, destituida del cargo, acusada de corrupción. ¡Tal vez, Néstor Humberto, quería solucionar los problemas del vecino país sin haber hecho nada por los problemas del propio!

No podemos olvidar que desde el 1 de enero hasta el 5 de julio de 2017 se han reportado 52 homicidios de líderes sociales y el consolidado entre el 1 de enero de 2016 y el 5 de julio de 2017 es de 186 homicidios, según la Defensoría del Pueblo:

La Fundación Paz y Reconciliación hace algunos días presentó el informe ‘Cómo va la paz’, allí se describen, en cerca de veinte ítems, los avances de la implementación de los acuerdos de paz. Uno de ellos se refiere al tema de líderes sociales, se analizan los niveles y el tipo de victimización, además, los presuntos responsables y la georreferenciación de las diferentes agresiones.

El informe llega en un momento de debate intenso, ya que, al menos, se encuentran dos focos importantes de controversias. El primero se refiere a la existencia o no de sistematicidad en estos homicidios, el Gobierno insiste en que no es así, mientras que organizaciones sociales y personalidades encuentran grados altos de sistematicidad. El otro foco del debate se centra en los asuntos de impunidad, para la Fiscalía la impunidad llega al 50%, es decir, en cerca de la mitad de los hechos ya se han identificado los responsables.

Para organizaciones sociales la impunidad está por encima del 70%, pues no se sabe nada de autores intelectuales, solo de algunos materiales, tampoco se conocen capturas y la Fiscalía si bien dice que ya todo está claro en la mitad de los casos, no entrega información, pues es reservada. Es decir, no se sabe con claridad de dónde se concluye que se han resuelto el 50% de los casos.

Sumado a lo anterior, en junio de 2017, el fiscal Martínez propuso eliminar delitos para descongestionar el sistema judicial y las cárceles del país, pero en agosto da declaraciones en los medios sobre su preocupación por la impunidad sobre delitos menores, sale a perseguir ladrones de celulares.

Y ni hablar de Odebrecht. El ex presidente de Corficolombiana, José Elías Melo, fue informado por su par de Odebrecht Colombia, Luis Antonio Bueno Jr. sobre los pagos que esta compañía le había hecho al exviceministro Gabriel García Morales, según confesión del empresario brasileño que tiene en su poder la Fiscalía colombiana. (Ver video)

El fiscal se vio obligado a vincular al ex presidente de Corficolombiana, José Elías Melo Acosta, a la investigación por el caso Odebrecht, después de que éste fuera delatado ante la justicia de EE.UU por los directivos de esa compañía brasileña. (Ver link)

Ahora, cuando el Juez segundo de garantías de Bogotá envía a La Picota a José Elías Melo, expresidente de Corficolombiana, por supuesto conocimiento y autorización de pago de sobornos al exviceministro de Transporte, Gabriel García Morales, para la adjudicación del contrato de la Ruta del Sol II (Ver link), el fiscal Néstor Humberto Martínez hace una presentación amañada del inventario de bienes y activos de las FARC-EP e induce a una valoración distorsionada del mismo. (Ver video)

Con varios Fiscales Generales señalados de corrupción, algunos de ellos de tener vínculos con el narcoparamilitarismo, parece ser que nuestro país ha tocado techo, se ha encontrado con Néstor Humberto “la tapa de la olla podrida” y, entonces, cabría preguntarse: ¿Tenemos un Fiscal o un politiquero?¿Somos un Estado corrupto o un Estado fallido?

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Tomado de conlaorejaroja.com

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