Eliminación de aranceles a productos agrícolas causará más crisis en el sector, advierte senador Robledo

El decreto que pone en cero los aranceles fue firmado por los ministros de Hacienda, Mauricio Cárdenas; Agricultura, Aurelio Irragori; y Comercio, Cecilia Álvarez; en 2015 las importaciones agropecuarias sumaron 11.4 millones de toneladas, palmicultores perderán $220 mil millones; mayores importaciones no bajarán los precios al consumidor, advirtió el congresista del Polo.

El decreto que elimina el arancel para el aceite de palma y soja, el fríjol, la lenteja y el ajo será fuente de más crisis entre los productores del campo, señaló el senador del Polo Democrático Alternativo, Jorge Enrique Robledo. Esta decisión del gobierno de Juan Manuel Santos está plasmada en el decreto 343 de 2016 firmado por los mencionados lleva a cero por seis meses 56 partidas arancelarias.

El libre comercio es la causa principal de la crisis agraria, expresó el congresista del Polo. En el 2015 las importaciones agropecuarias sumaron ¡11.4 millones de toneladas!, las más altas de toda la historia de Colombia. A los palmicultores nacionales, que siembran en medio millón de hectáreas en 125 municipios, la medida les significará pérdidas estimadas en $220 mil millones, equivalentes al 13 por cientos de los ingresos anuales del sector (http://bit.ly/219Z60y). Y a las 120 familias productoras de fríjol, presentes en Antioquia, Santanderes, Huila, Tolima, Boyacá, Cundinamarca y Nariño, se les hará más difícil sobrevivir por las mayores importaciones, que ya pesan alrededor de la tercera parte de la producción nacional. “Razón tienen quienes dicen que la bandeja paisa se está preparando en buena parte con productos importados”, afirmó Robledo.

No es con más importaciones, que reemplezan el trabajo y la producción nacionales por la extranjera, como se resolverá la grave crisis económica nacional, agregó Robledo. Los menores precios a los productores no van a significar menores precios al consumidor, pues los intermediarios, muchos de ellos empresas trasnacionales o con fuertes vínculos con el capital extranjero, convertirán en ganancias la crisis del agro.

El país necesita crear un verdadero modelo de desarrollo para el campo, que le dé empleo y fuentes sostenibles de creación de riqueza a los más de 16 millones de habitantes rurales, puntualizó el congresista.