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“Esto sí es meter en cintura a la Drummond”
Revista Semana
José Alejandro Arias es la persona que ha hecho las denuncias que arrinconaron a la multinacional carbonífera.
Hoy, después de que el gobierno decidió ponerle freno al cargue de carbón en barcazas por los constantes incumplimientos de la multinacional Drummond a las normas ambientales, políticos, analistas y periodistas no paran de hablar del caso.
Uno de los que ha opinado sobre el asunto es el abogado y periodista José Alejandro Arias. En la mañana del jueves 9 de enero dijo a Caracol Radio
Revista Semana
José Alejandro Arias es la persona que ha hecho las denuncias que arrinconaron a la multinacional carbonífera.
Hoy, después de que el gobierno decidió ponerle freno al cargue de carbón en barcazas por los constantes incumplimientos de la multinacional Drummond a las normas ambientales, políticos, analistas y periodistas no paran de hablar del caso.
Uno de los que ha opinado sobre el asunto es el abogado y periodista José Alejandro Arias. En la mañana del jueves 9 de enero dijo a Caracol Radio
que “esto es meter en cintura y dar un mensaje de legalidad en la ciudad de Santa Marta, donde parecería que incumplir la ley y que el crimen sí pagan”.
Pero, ¿quién es este hombre que hoy opina sobre el caso y que para el resto del país podría ser un desconocido? Se trata, ni más ni menos, de la persona que puso dos de las denuncias que hoy tienen a esta multinacional contra la pared. Arias demostró con fotografías que la empresa estadounidense había tirado al mar cientos de toneladas de carbón a principios del 2013.
El pasado 2 de enero, tan sólo 24 horas después de la prohibición emitida por el gobierno sobre el cargue de carbón, Arias publicó unas fotografías con las que demuestra que a pesar de las leyes Drummond continuaba transportando carbón en barcazas. El procedimiento implica llevar el carbón que la minera extrae desde un puerto en Ciénaga, cerca de Santa Marta, hasta unos buques ubicados a ocho kilómetros de la playa.
Ello deja contaminación no sólo en el aire, por las partículas que se liberan, sino la pérdida del mineral que cae al mar, como lo sostuvo en su momento una investigación de la Contraloría.
Por esto es que el abogado y periodista de 45 años, especialista en temas ambientales, no descansa.
José Alejandro Arias estudió en Bogotá, pero retornó hace 11 años a su tierra natal: Santa Marta. Desde los 14 años es activista, inspirado por su padre, quien le enseñó a preocuparse por la contaminación del mar. También es abogado de la Confederación Indígena Tayrona y representante del consejo territorial de cabildos, que reúne a las cuatro etnias de la Sierra Nevada de Santa Marta. Su defensa de los derechos ambientales lo llevó a destacarse como periodista en Radio Magdalena, además, de ser leído en su blog especializado en temas ambientales, seguido por cerca de 18.000 personas.
Entre sus investigaciones está un estudio dedicado a la contaminación de ocho playas afectadas con la bacteria ‘enterococcus’, publicado en el 2009. En ese año, las indagaciones de Arias lograron estallar el escándalo del hotel Six Senses en el Tayrona, estudio que realizó junto con el periodista Daniel Samper Pizano y el cual concluyó con la suspensión temporal del proyecto ecoturístico.
Arias ha utilizado chaleco antibalas durante más de un año y es una persona protegida por el gobierno nacional. La Unidad Nacional de Protección le asignó dos escoltas luego de que denunció amenazas contra su vida por una entrevista que le hizo a José Gelvez Albarracín, alias el ‘Canoso’, aquel jefe político de las Autodefensas que destapó el maridaje entre políticos y jefes paramilitares.
Por razones de seguridad, en diciembre del 2012 salió del país. En enero del 2013, cuando regresó, encontró nuevas irregularidades en una de sus denuncias. Se trata del caso Drummond, la segunda exportadora y comercializadora de carbón en el país, sobre la que Arias le tenía puesta la mirada desde el 2006.
El abogado considera que la cumbre de sus estudios fue el resultado de una investigación de la Contraloría sobre la degradación ambiental de la bahía de Santa Marta. Sus denuncias llevaron a que la entidad estableciera que las estaciones de monitoreo de calidad del aire habían sido manipuladas por la Drummond.
Pero Arias fue más allá. Publicó varias fotografías y videos que revelaron que la Drummond no cumplía sus planes de contingencia y que, por el contrario, vertía carbón en las aguas de Santa Marta. Al mismo tiempo advirtió que nunca prosperaron las denuncias interpuestas por los trabajadores de la compañía, quienes alegaban el deterioro de su salud por la exposición a las partículas de carbón.
En conversación con Semana.com dijo que, de primera mano, tuvo acceso al caso de un incidente ocurrido con una barcaza de la Drummond repleta de carbón, la cual se inclinó por cuenta de una falla humana. El periodista aseguró que los empleados decidieron sacar el carbón de la embarcación y arrojarlo al mar.
La empresa argumentó en ese momento que en la zona había condiciones climatológicas adversas y que por ello ocurrió el incidente. Sin embargo, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) certificó lo contrario. “Alcancé a tomar las fotos y el video y me sacaron de la zona. Los señores de la Drummond no permiten que buzos ni nadie entre en el área aun cuando ellos no tienen esa potestad de acuerdo a su licencia ambiental”, precisó.
Fue por su trabajo que el gobierno en enero del 2013 decidió frenar temporalmente, en Santa Marta, la carga del mineral por parte de la Drummond, empresa que terminó por aceptar la medida del gobierno y comprometerse a mejorar su plan de contingencia.
Ahora, un año después, Arias continúa siendo un personaje fundamental para la defensa del medio ambiente en la costa Caribe y una de las piezas claves en el freno a las irregularidades de una de las empresas más poderosas del país.
Casi 12 meses después y mientras los colombianos disfrutaban de las fiestas de Año Nuevo, él seguía en su labor de recolectar nuevas evidencias que demostraran que la Drummond continuaba cargando carbón en barcazas, lo que podría producir un nuevo daño ambiental en la bahía.
Revista Semana, Bogotá.