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“Si no se ponen de acuerdo, el país seguirá desquiciándose”

Entrevista de la Revista Semana al senador Jorge Enrique Robledo, Bogotá, octubre 8 de 2016

El senador Jorge Robledo explica por qué le escribió una carta a Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe antes de su encuentro. Les pide resolver sus diferencias y proponer un acuerdo nacional.

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Entrevista de la Revista Semana al senador Jorge Enrique Robledo, Bogotá, octubre 8 de 2016

El senador Jorge Robledo explica por qué le escribió una carta a Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe antes de su encuentro. Les pide resolver sus diferencias y proponer un acuerdo nacional.

Jorge Robledo, del Polo Democrático, es de los pocos senadores que en Colombia pueden darse el lujo de haber hecho oposición tanto a Álvaro Uribe como a Juan Manuel Santos. A ellos, los mayores contradictores que ha tenido en su carrera política, les escribió unas líneas horas antes del determinante encuentro que sostendrán este miércoles en la Casa de Nariño.

“Tienen ustedes el deber y la gran responsabilidad de ponerse de acuerdo en unas formulaciones que les permitan coincidir con el resto del país y con las FARC (…) Hago votos para que ustedes no sean inferiores a este reto que les ha impuesto la vida, y los más altos intereses de Colombia”, se lee en la carta que el senador del Polo dirigió al presidente Santos y al senador Uribe.

Robledo explicó a Semana.com por qué sintió en la necesidad de escribirles. “La votación del plebiscito –dice- es que todos estamos de acuerdo con desarmar a las FARC, pero que hay una diferencia en cómo hacerlo. Entonces se necesita un acuerdo de unidad nacional al respecto, que hay que tramitarlo entre todos los que estamos en el asunto. Y en ese sentido tanto Santos como Uribe ya han dicho que hay que adelantar ese acuerdo”.

Semana.com: ¿Cual es el mensaje que le envía a Santos y Uribe antes de la reunión?

Jorge Robledo: La carta apunta a insistirles en que sin ellos, sin una actitud genuinamente comprometida con el acuerdo nacional, pues sencillamente no va haber acuerdo. Sin ellos no puede haber acuerdo, pero ojo, el acuerdo no puede ser un acuerdo que se dirija contra otros sectores del país, el acuerdo tiene que incluir a toda la nación, se tiene que terminar tramitando con las FARC, y tiene que ser un acuerdo que no tenga políticas económicas que maltraten a los colombianos, al pueblo raso, a la clase media, a los empresarios no monopolistas, y que fuerzas como el Polo, que no nos sentimos representadas ni por Santos ni por Uribe, tengamos las garantías suficientes.

Semana.com: ¿Que tan urgente es que se pongan de acuerdo?

J. R.: No habrá solución a este resultado del plebiscito si ellos no se ponen de acuerdo, y tienen el deber de hacerlo y promover un acuerdo democrático que sea el que necesite el país. Sólo así será realidad lo que todos queremos, el desarme de las FARC, desarme con el que están de acuerdo las propias FARC. Es que es inaudito que si todos estamos de acuerdo con que suceda una cosa, quienes tienen fuerza política suficiente para sacar estas cosas adelante no hayan sido capaces de ponerse de acuerdo, entonces yo espero que esta vez sí lo hagan

Semana.com: Llevan más de seis años sin hablar, ¿es optimista de que haya acuerdo?

J. R.: Es probable que hoy mismo no, pero digamos que hay la posibilidad de que se inicien unas conversaciones en serio para que en un plazo prudencial se logre llegar a estos acuerdos. Pero lo que importa es que tengan la voluntad política para hacerlo porque si no la tienen, aquí vamos a terminar dentro de unos días en otra pelea de perros y gatos señalando quien fue el culpable de que no se hubiera podido constituir la unidad nacional y mientras tanto los colombianos viendo un chispero. Y es obvio que la responsabilidad la tienen tanto Santos como Uribe, que representan las mayores fuerzas políticas de Colombia. Hoy en Colombia sin ellos no es posible hacer acuerdos de unidad nacional. Ese es el punto. Incluso hay que pensar en el cuento de los papas que nunca se pudieron poner de acuerdo y los campesinos los encerraron en una abadía y dijeron de aquí no salen hasta que no se pongan de acuerdo. Va tocar hacer igual

Semana.com: ¿Teme que el diálogo se prolongue?

J. R.: Si no llega a haber acuerdo, uno ya entra en la duda de por qué no hay acuerdo. Y entonces no lo van a trasladar al 2018 porque esa puede ser la solución entre comillas, como no hubo acuerdo, que lo resuelva el presidente del 2018. Entonces nos van a meter en otra campaña electoral sobre este tema, monopolizando todos los asuntos de la opinión pública, cuando además todos sabemos que la Unidad Nacional y el Centro Democrático tienen inmensas coincidencias sobre todos los demás asuntos de la vida del país. Aquí somos muchos los que estamos preocupados porque esta polarización nos lleve al viejo bipartidismo liberal-conservador, en el que al pueblo lo azuzaban incluso a matarse entre sí, mientras las élites se ponían de acuerdo en los asuntos medulares y en los grandes negocios. Sería un escenario dramático. Los colombianos tenemos el derecho a llamar a Juan Manuel Santos como a Álvaro Uribe a que asuman con responsabilidad la fuerza política que representan, y le encuentre solución al problema. Aquí estamos así en buena medida por ellos. Y ellos tienen el deber de encontrarle una solución a este problema.

Semana.com: ¿Usted pediría renegociar algún punto del acuerdo de la Habana?

J. R.: Yo me siento maltratado en el acuerdo en relación con las curules de las FARC. Desde la perspectiva del Polo Democrático, es un tema que hay que mirar en esta nueva situación. Pero eso después. El punto principal es que si no se resuelve el problema de que las fuerzas principales lleguen a un acuerdo, pues todo se muere y las cosas se irán para el 2018 o no sé dónde terminaremos, porque la incertidumbre en la que estamos es de alto riesgo, no es un asunto de menor cuantía en el que estamos.

Semana.com: ¿Qué consejo les daría a Santos y Uribe?

J. R.: Aquí hay un problema de importancia superior, nacional, en el que todos los dirigentes de todos los niveles tenemos una responsabilidad con el país. Y ellos sí que la tienen, porque, repito, estamos en esto porque no pudieron ponerse de acuerdo. Si se hubieran puesto de acuerdo, habría sobrado el plebiscito, o habría arrasado el Sí. Estamos en la encrucijada en la que estamos, en la incertidumbre de alto riesgo, porque ellos no pudieron ponerse de acuerdo. Hay que convertir en un clamor nacional la exigencia a Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos para que se pongan de acuerdo, ellos verán en cómo, pero que se pongan de acuerdo, si no el país va a seguir desquiciándose.

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