Conecta con nosotros

Nacional

Tanto va el cántaro al agua…

Por Octavio Quintero  

No se requiere saber cuál es el proyecto de Jesús, ni siquiera ser cristiano, para estar en sintonía con el papa Francisco que en forma clara y tajante denuncia la expoliación social de un sistema imperante que, en sus mismas palabras, “ya no se aguanta, no lo aguantan los campesinos, no lo aguantan los trabajadores, no lo aguantan las comunidades, no lo aguantan los Pueblos… Y tampoco lo aguanta la Tierra”.
 
Este discurso del papa en la Expo Feria de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, ante el Segundo Encuentro Mundial de los Movimientos Populares, provocó un estallido de aplausos a la eminencia mayor de los católicos.

Publicado

en

Por Octavio Quintero  

No se requiere saber cuál es el proyecto de Jesús, ni siquiera ser cristiano, para estar en sintonía con el papa Francisco que en forma clara y tajante denuncia la expoliación social de un sistema imperante que, en sus mismas palabras, “ya no se aguanta, no lo aguantan los campesinos, no lo aguantan los trabajadores, no lo aguantan las comunidades, no lo aguantan los Pueblos… Y tampoco lo aguanta la Tierra”.
 
Este discurso del papa en la Expo Feria de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, ante el Segundo Encuentro Mundial de los Movimientos Populares, provocó un estallido de aplausos a la eminencia mayor de los católicos.

No se conocen antecedentes en que el máximo líder de la Iglesia pronuncie un discurso como este, catalogado, en términos boxísticos, como un ‘gancho al estómago’ del sistema capitalista que, nuevamente en las propias palabras del sumo pontífice “sigue negándoles a miles de millones de hermanos los más elementales derechos económicos, sociales y culturales”.
 
Es –dicen los habituales analistas del vaticano—el comienzo de una nueva encíclica social que el papa viene bordando en palabras, pero que, finalmente, terminará en un texto, corregido y aumentado, a la manera de Rerum Novarum, la famosa encíclica de León XIII que revolucionó al mundo desde 1891 en adelante, hasta nuestros días, porque si alguien se toma el trabajo de releerla, ahí está toda la llamada doctrina social de la iglesia que no dista mucho de la doctrina social de Marx-Engels contenida en el Manifiesto Comunista de 1848.
 
¿Es el papa Francisco un revolucionario? Sí, definitivamente sí. En su corto papado muchos conceptos cristianos labrados en piedra se están desmoronando puntualmente… Pero, lo que queda de bulto, es el cuerpo global de su discurso, que desde el inicio mismo de su pontificado carga contra el sistema capitalista en toda ocasión en que Francisco le echa mano a un micrófono, hasta en las homilías de la Casa de Santa Marta, la capilla predilecta de su misa cotidiana en donde, recientemente, haciendo alusión al símbolo del imperio capitalista, Wall Streat, dijo que “las riquezas que cuentan son las reconocidas por la «Bolsa del cielo»”.
 
¿Hasta dónde calará este discurso socialista de Francisco? Él mismo dijo por ahí que se siente casado; y a su oído han llegado rumores de atentados contra su vida. Podría ser que, dentro de poco, siga el mismo camino de su predecesor –la renuncia; y podría ser también que lo asesinen… Pero la Iglesia Católica, Apostólica y Romana ya no es la misma; es otra a partir de Bergoglio, el obispo del “rincón del mundo” hasta donde llegó el “humo blanco” que lo consagró papa ese ya histórico 13 de marzo del 2013.
 
Y, mientras tanto, ya tenemos un tenor en el púlpito a cuya voz debemos unir la nuestra para gritar con él: “Queremos un cambio, un cambio real, un cambio de estructuras. Este sistema ya no se aguanta, no lo aguantan los campesinos, no lo aguantan los trabajadores, no lo aguantan las comunidades, no lo aguantan los pueblos. Y tampoco lo aguanta la Tierra, la hermana Madre Tierra”. 

Continúe leyendo
Click para comentar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *