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“Por primera vez en 500 años, América Latina ha dado pasos muy significativos hacia la liberación, al enfrentar el ataque neoliberal: Chomsky
Agencias / Buenos Aires
“América Latina ha estado a la vanguardia en luchar contra el ataque neoliberal”, sostuvo el lingüista y filósofo estadounidense, Noam Chomsky, en desarrollo de su charla magistral en el marco del Foro Internacional Emancipación e Igualdad que organizó el Ministerio de Cultura de Argentina. En su disertación durante el primer día del encuentro académico y de reflexión política, el científico social destacó también el surgimiento en Europa, donde la población sufre muchísimo por las políticas de rescate, de movimientos como Syriza en Grecia y Podemos en España.
Agencias / Buenos Aires
“América Latina ha estado a la vanguardia en luchar contra el ataque neoliberal”, sostuvo el lingüista y filósofo estadounidense, Noam Chomsky, en desarrollo de su charla magistral en el marco del Foro Internacional Emancipación e Igualdad que organizó el Ministerio de Cultura de Argentina. En su disertación durante el primer día del encuentro académico y de reflexión política, el científico social destacó también el surgimiento en Europa, donde la población sufre muchísimo por las políticas de rescate, de movimientos como Syriza en Grecia y Podemos en España.
La pérdida de hegemonía de Estados Unidos y el rol de América Latina en la geopolítica internacional, fueron algunos temas abordados por este intelectual de 86 años de edad, filósofo, profesor de MIT y activista político, quien se ha convertido por sus conspicuos análisis en un referente del pensamiento crítico y alternativo a nivel mundial.
En su concepto, Latinoamérica avanza rumbo a liberación del imperialismo. “Esto incluye pasos significativos hacia la integración y hacia el enfrentamiento a problemas internos extremadamente graves, que habían impedido el crecimiento saludable de lo que debería ser una de las regiones más dinámicas y prosperas del mundo”, dijo.
Al hacer un recuento histórico, Chomsky recordó que el plan de Estados Unidos para América Latina era acabar con las agrupaciones regionales. “El nacionalismo económico debía ser eliminado”, apuntó.
Sin embargo, ese orden establecido, en el que Estados Unidos se imponía como “dueño del mundo”, ha terminado sostuvo el intelectual norteamericano, quien consideró que ese país “está ahora en una fase de decadencia final”.
Recordó que al final de la Segunda Guerra mundial, mientras las naciones que habían entrado en ese conflicto como grandes potencias salían “muy dañadas”, los Estados Unidos comenzaron a crecer exponencialmente, alcanzaron a concentrar “la mitad de la riqueza del mundo”, multiplicaron su poderío bélico (la bomba atómica) y expandieron su control sobre el continente y los dos océanos. Sobre esa base, agregó, la dirigencia norteamericana a través del Departamento de Estado, se dispuso a “organizar el mundo para satisfacer las necesidades de los sectores dominantes de EE.UU., es decir, de los sectores corporativos”. Y lograron “detentar un poder indiscutido”, que intentaba obstruir la soberanía de otros Estados que pudieran competir con Norteamérica.
Chomsky afirmó que “por primera vez en 500 años, América Latina ha dado pasos significativos hacia la liberación del dominio imperial”, al comparar en este Foro cómo llegó su país -en términos de influencia en la región- a las convenciones de Chapultepec, de 1945, y de Cartagena de Indias, de 2012, porque “fueron radicalmente distintas de manera que indican elocuentemente cuál es la evolución de los asuntos mundiales”.
Dijo que “el aislamiento de Estados Unidos y Canadá quedó más marcado por las nuevas agrupaciones regionales” y consideró que el hecho de que Washington busque abrir conversaciones diplomáticas con Cuba es un intento de no aislarse completamente con Latinoamérica.
“La decadencia de Estados Unidos está en marcha desde que el país alcanzó su punto máximo en 1945. El poder está pasando a China”, sostuvo.
En la conferencia magistral que dio en el Teatro Cervantes de Buenos Aires, totalmente colmado, Chomsky explicó que en 1945 los Estados Unidos estaban en una posición de fuerza abrumadora sin precedente en la historia”. En contraste, “el resultado de la cumbre de Cartagena está bien resumido en un titular de un diario jamaiquino, que dice ‘la cumbre demuestra cuánto ha decaído la influencia yankee’”.
“La conferencia (la Sexta Cumbre de las Américas) no pudo llegar a decisiones por consenso porque los Estados Unidos y Canadá estaban aislados en la mayoría de los principales temas, uno era la incorporación de Cuba en la organización y el otro los pasos para revertir la guerra antinarcóticos de los Estados Unidos”, enumeró Chomsky.
“Había un tercer tema, el pedido de apoyo de la Argentina por el conflicto de Malvinas y nuevamente los Estados Unidos y Canadá estaban solos en la posición, todo esto era inimaginable hace unos pocos años”, añadió.
“El aislamiento de Estados Unidos y Canadá queda aún más marcado por la formación de agrupamientos como la Unasur y la Celac”, afirmó Chomsky, quien aseguró: “Los pasos recientes de (el presidente norteamericano Barack) Obama hacia la normalización de las relaciones con Cuba se ven impulsadas por un esfuerzo para impedir el aislamiento total de lo que solía ser nuestra región de por acá”.
En su conferencia magistral, Chomsky mostró la impostura norteamericana esbozada para justificar el despliegue militar y la amenaza latente de nuevas incursiones bélicas. “¿Qué pasó cuando terminó la Guerra Fría?”, se preguntó. Los sucesivos gobiernos estadounidenses mantuvieron la presión militar “no para enfrentar a la Unión Soviética, sino para enfrentar a las potencias del Tercer Mundo”. La idea dominante en los Estados Unidos sigue siendo la misma y Chomsky la describió con sutil ironía como “una preocupación por el nacionalismo radical que sucumbe a la falacia de que los principales beneficiarios de la riqueza de un país deben ser los ciudadanos de ese país y no los inversores de los Estados Unidos”.
Desde fines de la década del 70 del siglo pasado esa ideología se tradujo en “un ataque neoliberal, un ataque mundial sobre los derechos humanos”, y en una ingeniería burocrática organizada para proteger a los grandes bancos y corporaciones de las recurrentes crisis del capitalismo, cuyos costos se transfieren al conjunto de la sociedad. “América latina –evaluó– ha estado a la vanguardia de la lucha contra el ataque neoliberal.”
Al cierre de su conferencia magistral, Chomsky manifestó: “todos los que tenemos los ojos abiertos comprendemos que la especie humana está al borde del precipicio. Hay dos sombras oscuras que se ciernen sobre todo lo que discutimos: la guerra nuclear y la catástrofe ambiental”.
Consideró que “para la amenaza de las armas nucleares, la respuesta es eliminarlas”, pero recordó que Estados Unidos “acaba de anunciar un programa de modernización de sus armas nucleares”.
Se mostró pesimista sobre los problemas ambientales generados por la actividad del hombre al referirse en particular a la extracción de combustibles fósiles. “No está claro que sepamos cómo superar la catástrofe ambiental”, pero es imprescindible abordarla, si es que el hombre quiere seguir viviendo sobre la tierra, puntualizó.
Chomsky es una de las personalidades que participan en el Foro por la Emancipación y la Igualdad, que comenzó el pasado jueves 12 de marzo en Buenos Aires con un llamado a defender la soberanía y la unidad de América Latina ante las constantes amenazas a su democracia y desarrollo.
La presentación de Chomsky y su intervención en el siguiente video:
Buenos Aires.