Internacionales
Un millón de personas en la manifestación de París contra la reforma laboral que busca imponer el gobierno de Hollande
Tal y como estaba previsto, Francia vivió el pasado martes 14 de junio una jornada masiva de protestas en todo el país en contra de la reforma laboral patronal que quiere sacar adelante el Gobierno de Hollande y que facilitará y abaratará el despido. La protesta fue especialmente multitudinaria y violenta en París, donde bajo una fuerte represión, decenas de miles de personas se manifestaron en el centro de la ciudad.
Tras violenta enfrentamientos de la policía antimotines durante manifestaciones previas, se prohibió la entrada al centro de París a cerca de 130 activistas, cosa que solo sirvió como caramelo mediático, ya que por supuesto no pudo ser comprobada.
Tal y como estaba previsto, Francia vivió el pasado martes 14 de junio una jornada masiva de protestas en todo el país en contra de la reforma laboral patronal que quiere sacar adelante el Gobierno de Hollande y que facilitará y abaratará el despido. La protesta fue especialmente multitudinaria y violenta en París, donde bajo una fuerte represión, decenas de miles de personas se manifestaron en el centro de la ciudad.
Tras violenta enfrentamientos de la policía antimotines durante manifestaciones previas, se prohibió la entrada al centro de París a cerca de 130 activistas, cosa que solo sirvió como caramelo mediático, ya que por supuesto no pudo ser comprobada.
El movimiento contra la Reforma Laboral (la llamada ley «El Komrhi») comenzó en Francia hace tres meses. Durante todo este tiempo se han multiplicado las acciones en todos los sectores: huelgas indefinidas, bloqueos de refinerías de petróleo.
El sindicato de trabajadores CGT afirmó que la marcha en París fue la mayor demostración de fuerza desde que comenzaron las protestas contra la reforma laboral a inicios de marzo. “Esto no es el fin. La lucha está lejos de haber terminado”, declaró el líder de la CGT, Philippe Martínez.
Unos 700 autobuses transportaron a manifestantes a la capital desde todo Francia para participar en la marcha, sostuvo, y agregó que se estaban realizando protestas menores en otras ciudades. Al mismo tiempo, los trabajadores de la empresa ferroviaria estatal SNCF paralizaron su trabajo. Pero los gendarmes y policías franceses se han empleado con brutalida durante los enfrentamientos en la manifestación contra la reforma laboral del Gobierno francés.
El recorrido de París, de más de cinco kilómetros entre la plaza de Italia e Inválidos, se ha llenado totalmente con los cortejos de las diferentes secciones locales y regionales de sectores industriales o de servicios.
Hora y media después de arrancar, en la manifestación de París se han registrado graves incidentes por la injustificada represión policial. Ante los ataques, los manifestantes han destruido escaparates de tiendas de lujo y mobiliario urbano, han volcado coches para formar barricadas y detener la desesperante violencia policial, a la que vez que lanzaban botellas y otros objetos a los agentes.
Los sindicatos CGT y Force Ouvriere afirman que la reforma minará los estándares de protección laboral. Varios sondeos de opinión demuestran que hasta un 80% de los votantes están descontentos con la reforma.
