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LLEGO EL DIA D… HOY ELEGIMOS PRESIDENTE, PETRO O DUQUE

Hoy antes de la seis del tarde el país conocerá quien es el presidente que regirá su destino desde el 7 de agosto de 2018 hasta el 7 de agosto de 2022.

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Hoy antes de la seis del tarde el país conocerá quien es el presidente que regirá su destino desde el 7 de agosto de 2018 hasta el 7 de agosto de 2022.

 

Por Jaime Dussan Calderon

Hoy antes de la seis del tarde el país conocerá quien es el presidente que regirá su destino desde el 7 de agosto de 2018 hasta el 7 de agosto de 2022.

En la historia colombiana reciente nunca se habían presentado dos candidatos tan parecidos y al mismo tiempo tan diferentes. Los dos rompieron las filas en sus bloques de poder. Duque salto a más de cinco aspirantes de los tradicionales y de verdad muy pocos creían que ganara en el centro democrático y después fuera escogido en primera vuelta.

Hace un año ni a Vargas, ni a Humberto de la Calle, ni a Martha lucia, ni a Ordoñez, ni a jefes como Gaviria, Santos o a los de la U o a los conservadores, ni siquiera a la mayoría parlamentaria, empresarios, ni a dueños de grupos económicos, les paso por la cabeza que el que “dijera Uribe”, fuera su candidato y el eventual presidente de Colombia, y menos los obligara a recoger sus criticas y desavenencias y declarar que es el mejor y además expresar su sumisión al jefe del centro Democrático, el polémico y cuestionado ex presidente Uribe.

Petro creía necesario una consulta de todo el campo democrático y sectores del establecimiento como liberales, gente de la U, los del verde y el polo los de compromiso ciudadano y en ese norte trabajó hasta última hora, antes de la consulta liberal y de los acuerdos que se ungieron a Fajardo candidato.

No se le puso cuidado, el creía en ese bloque para el acuerdo sobre lo fundamental. Y pensaba que no seria el candidato que unificara, pensó en De la Calle o Fajardo y al no ser oído, fue con listas propias al congreso y a la consulta con el ex Alcalde de Sta. Marta, el doctor Caicedo y gano una y otra.

Después insistió a fajardo y a Humberto de la Calle y sin ser considerados sus argumentos, siguió y gano en primera vuelta y saltó al primer lugar de los alternativos y está dentro de las posibilidades ser presidente hoy.

De no obtener el cargo sin duda será el más destacado dirigente con opción de ser el punto de referencia para la oposición política seria al régimen, avanzar en las elecciones de 2019 y ser el presidente del 2002.

Dos figuras entonces, una sin experiencia de ser ejecutivo y menos con autonomía y vuelo propio, es decir, el que ‘dijo Uribe’ y el otro sin apoyo de jefes tradicionales y algunos del sector de Fajardo pero con gran simpatía nacional puede ser el que ‘escoja el pueblo’.
El programa de Duque, es conservador, se inspira en las tesis económicas neoliberales, del libre mercado, de sometimiento a los mandatos de los organismos económicos transnacionales, sin respeto a la soberanía y con sumisión a las imposiciones del gobierno de Washington. No es amigo de la carta política democrática del 91 y más se afianza a la del 86 y a los programas antidemocráticos del bloque de poder que ha reformado negativamente aspectos básicos de la carta de los derechos.

En lo social, sus propuestas son ambiguas y de preocupación para los trabajadores, los sectores medios del campo y de la ciudad y sobretodo para las nuevas generaciones que han apoyado la iniciativa de que la educación es el eje fundamental del crecimiento y desarrollo económico, social, cultural, del medio ambiente y los derechos fundamentales de los ciudadanos.

En la política de paz, el cumplimiento de los acuerdos de la Habana y las nuevas negociaciones con el ELN tiene postura de retroceso a los avanzado por el gobierno que sale y al contrario, prefiere la guerra como método para vencer los grupos al margen de la ley sin tener postura clara frente a situaciones conflictivas como el resurgimiento de grupos de paramilitares y narcotraficantes, muchos de ellos, inmersos en el poder y en su candidatura en cuanto apoyaron y apoyan a dirigentes de partidos que hoy hacen parte del bloque que trabaja por su elección.

En el campo de las reformas estructurales, se notan retrocesos en el caso de la justicia, el ordenamiento territorial, el económico, el tributario y pensional, entre otros.

En cuanto a las relaciones internacionales, se ubica en el bloque de Estados Unidos y desprecia lo latinoamericano y lo de los países no alineados.

Finalmente es la expresión del bloque político y económico, nacional e internacional que ha gobernado al país y que sigue siendo responsable de la crisis económica, social y política, de la corrupción y la destrucción de los avances democráticos. Podría resumir que un eventual gobierno de Duque es el retorno al fortalecimiento de la de la ultraderecha nacional.

Petro por su parte, ha logrado, ser el vocero del bloque de la ciudadanía que apoya los avances democráticos y progresistas contenidos en la carta política vigente. De los avances del proceso de paz y convivencia nacional con reformas que han permitido posturas mucho más avanzadas de sectores que se alinean en el campo democrático.

Su programa resume los presentados en las candidaturas de Carlos Gaviria, Antanas Mokus, Humberto de la Calle, Sergio Fajardo y él mismo. Banderas como la profundización de la democracia, con la participación ciudadana, la ampliación de la propiedad, la atención al desarrollo del campo, de la industria y el comercio nacional y el establecimiento de unas relaciones comerciales con respeto a la autonomía, la soberanía y la integración distan del programa del contradictor.

Petro es reformista, democrático, visionario, progresista, vocero de las mayorías nacionales que sin pensar quién es Petro como individuo, piensan mejor en la necesidad de un autentico vocero de sus aspiraciones y necesidades resumidas en el programa de la Colombia Humana adicionado con los de Coalición Democrática y los contenidos en las propuestas alternativas de sectores del establecimiento que hoy prefieren desligarse de él y respaldar las iniciativas del gran bloque alternativo que es ampliamente representativo de todos los sectores de la sociedad sin excepción que consideran que el candidato Gustavo Petro engendra una posibilidad cierta para el logro de un país con cambios y transformaciones democráticas.

Esperamos que los resultados sean transparentes, que el que pierda reconozca el veredicto popular y se disponga a construir una oposición basada en la carta constitucional y la ley y el que gane, gobierne con el convencimiento de que su contradictor representa sectores vitales de la sociedad que no se pueden desconocer. De no ser así, nos preparamos para 4 años de confrontaciones irracionales que podrían regresarnos a épocas violentas y de enfrentamientos que el país no quiere repetir.

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